El Juzgado de lo Penal nº3 de Donostia condena a J.R.A. por violar los derechos de propiedad intelectual de la marca Fiiish en España.
Tres años y medio han pasado desde que se realizó la primera denuncia ante los juzgados por falsificación de señuelos hasta que el Juzgado de lo Penal de Donostia ha firmado la primera sentencia condenatoria por estos hechos.
Tres años en los que hemos visto como "piratas" se dedicaban a aprovecharse del trabajo de otros con total impunidad y descaro bajo la etiqueta de "artesanos". "Artesanos copiadores" que vendían el desarrollo de todo señuelo de vinilo famoso en el mercado, a unos precios "supuestamente" más bajos que los originales, pero curiosamente no mucho más bajos, en la mayoría de los casos en torno al 20%. Esta cantidad correspondía básicamente al 21% de IVA que pagan religiosamente todas las empresas, y es que como buenos piratas, trataban de cobrar el máximo posible.Anunciaba sus "creaciones" en las redes sociales, tenía pedidos mínimos por referencia y un extenso abanico de colores y tallas a la venta, anunciando habitualmente los lotes enviados, el destino geográfico de los mismos y los resultados pesqueros de sus "creaciones".
Durante este periodo solo hemos podido callar, no decir nada y dejar los casos en manos de los abogados, ya que cualquier cosa que hiciésemos o dijésemos podría ser utilizado en nuestra contra y la de la marca que representamos., y es que los "piratas" y sus "bandas de allegados" no tienen ningún escrúpulo en desacreditar el trabajo de los demás al defender sus derechos.
Más casos abiertos
Pero no sólo han sido "piratas" del ciberespacio los que han tratado de beneficiarse del trabajo de un equipo, si no que también hay causas abiertas contra tiendas físicas que han pensado que violar los derechos intelectuales o vender en "negro" falsificaciones es algo rentable, aunque la escusa más escuchada ha sido "yo no sabía nada".
Incluso, hace unas semanas hablaba con el dueño de una tienda que estaba "indignado" por haberle notificado legalmente que los abogados de la marca iban a emprender acciones judiciales contra él por vender falsificaciones de un señuelo registrado, nos decía que "cómo podíamos haberle hecho eso, que si le hubiésemos llamado lo hubiese quitado sin problema". ¿alguien cree que los piratas nos llaman habitualmente para decirnos: "oye, que voy a vender falsificaciones, pero que si os molesta no me denunciéis, con llamarme lo quito y listo... (o los escondo debajo del mostrador...)"
Falsificaciones e imitaciones
Hay una falsa creencia que dice que cambiando el 20% o algunos detalles no es una copia. Y los abogados lo explicaban muy simple:
Si a un elefante le pones un cuerno... no deja de ser un elefante con un cuerno. Si a un caballo le pones orejas de conejo, no deja de ser un caballo con orejas de conejo.
A nadie se le escapa la diferencia entre un Rapala Max Rap y un Daiwa Saltiga, ambos tienen babero, son largos, tienen ojos y poteras...son inconfundibles y distintos siendo un señuelo duro de la misma longitud. Si a un Black Minnow le cambias el color, y en vez de llevar 14 rayas en el lateral lleva 28, le añades una aleta, y el ojo en vez de pegado es en 3D, no deja de ser un Black Minnow modificado y protegido por la ley.
Los fabricantes y dueños de las marcas también comen y dan trabajo.
Habitualmente se les trata como entes impersonales o macro empresas con ganancias indecentes, cuando en la mayoría de las ocasiones se trata de empresas medianas o pequeñas que mantienen plantillas modestas a duras penas a base de ingenio, trabajo, esfuerzo y en la mayoría de los casos, invirtiendo todo su patrimonio y jugándoselo a todo o nada.
Concretamente Fiiish surgió en el garaje de Matt, Fred y Pierre hace 6 años, después de dos de duro trabajo diseñando, modificando y probando la idea que tenía de un buen señuelo. Actualmente da trabajo a un total de 11 personas y para cualquier pequeña empresa es muy duro sobrevivir en los tiempos que corren, y más si tiene que luchar en los juzgados día si y día no.
Sin entrar en clases de economía, hay que tener en cuenta todo el trabajo y número de personas que hay detrás de cualquier producto para que una idea salida de la cabeza de un pescador llegue a las manos de cualquier aficionado del mundo: Diseño, registros, abastecimiento, compras, producción, logística interna, logística externa, I+D, recursos humanos, finanzas, préstamos, defensa legal... y si alguien viene a quitarle el fruto de su esfuerzo es normal que se recurra a la defensa de los derechos y puestos de trabajo de toda esta gente.
Algunos quieren ser más listos que nadie
Parece que vivimos en el país en que todo vale:- Vale robarle las ideas a los demás y justificarnos con excusas vulgares como "tienen ganancias indecentes", "el producto no vale lo que piden" o "soy un artesano que quiero ganarme la vida (copiando señuelos)".
- Vale coronar al pícaro y ajusticiar al que levanta la mano defendiendo sus derechos.
- Vale quejarse de la sanidad, la justicia y los políticos y también vale no pagar impuestos, ni seguridad social con los que mantenemos esos servicios. ¿alguien lo puede entender?.
España está lleno de corruptos y sinvergüenzas, y el modo que hemos encontrado para salir adelante de todos estos ataques es recurrir a los juzgados, que aunque lentos, acaban condenando a los "piratas".
Si todo el tiempo que dedica esta gente a clonar y falsificar. lo dedicaran a crear sus propios señuelos, quizá algún día podrían vivir de ello, aunque para eso se requiere unas cantidades ingentes de esfuerzo, sacrificio, dedicación, talento y arriesgarlo todo por un sueño.
El talento de crear no es el talento de copiar "artesanalmente". Si realmente te gusta crear señuelos, arriésgate, lucha por tus ideas y trabaja para demostrar a los demás lo brillante de tus ideas.
La justicia es lenta pero termina cobrando sus deudas.